jueves, 24 de diciembre de 2009

Más allá de la representación pactada. Una visión sobre la producción artística de GRETA ALFARO

PUBLICADO EN EL Nº1 DE LA REVISTA ACCM





El imaginario colectivo, es decir, el imaginario consensuado y pactado entre el poder, la sociedad y los medios de comunicación, nos ofrece un tipo de representación de los momentos de celebración estandarizada. Este tipo de representación, en todas las épocas, ha sido una forma de mostrar los valores, normas y roles sociales dominantes dentro de un sistema. En la actualidad el modelo imperante es el del American Way of Life, una visión que nos ofrece una versión de la vida en la que la seguridad y la felicidad son el pretexto del mantenimiento del statu quo.

El trabajo de Greta Alfaro (Pamplona,1977) parte de una reflexión crítica sobre este hecho. Para ello, la artista modifica el significado de las representaciones tradicionales a través de la inclusión de elementos discordantes en las mismas, condicionando y alterando su lectura. Así en la obra Celebración – presentada en Liquidación Total –, Alfaro se apropia de una serie de fotografías sobre momentos familiares, a las que añade elementos inquietantes: una soga lista para ahorcar, imágenes de aparatos de tortura en un bonito interior burgués o unas rayas de cocaína ante la presencia inocente de una niña. Por medio de este recurso propio del surrealismo – pensemos por ejemplo en Un Perro Andaluz de Buñuel – el contexto se transforma. La idea de seguridad y felicidad que la imagen original desea transmitir es pervertida, saliendo a la luz la fragilidad real inherente a todas las relaciones humanas.

Si como vemos en Celebración se parte de imágenes preexistentes, para añadir elementos que modifican la percepción del público, en su último trabajo In ictu oculi – ganador del premio El Cultural de Fotografía 2009 – la artista opta por la realización de un vídeo de nuevo cuño. Una producción realizada en Fitero (Navarra) y acompañada de diez fotografías. La grabación, desde un único e inmóvil punto de vista, recoge la acción de un grupo de buitres en su espacio natural, sobre una mesa preparada para la ocasión, al honor de tan singulares comensales. El resultado, un antibanquete que nos trae a la memoria inolvidables imágenes como la invasión de la mesa por los mendigos en Viridiana – alusión de la propia artista en su artículo para art.es – o la antropofágica cena ofrecida al capo de El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante. La mesa, expresión de un determinado nivel social, estrategia de seducción, es entregada al buitre, animal carroñero por excelencia. De este modo, queda transformada en representación de una metáfora sobre lo violento y destructivo inherente a la condición humana. Una violencia siempre presente, a pesar de los intentos de las representaciones pactadas por ocultar todo conato de tensión.

El título de la obra In ictu oculi (en un abrir y cerrar de ojos), hace referencia a una vanitas barroca de Juan Valdés Leal conservada en el Hospital de la Caridad de Sevilla. Un guiño a un tiempo distante en el que nuestra relación con la violencia y la muerte eran muy diferentes, algo casi cotidiano, como bien se empeñan en recordarnos las vanitas del diecisiete. Esta proximidad con el sufrimiento, que en el barroco se expresaba de manera abierta, en nuestros días se aparta de toda representación colectiva. De ahí la fuerza de In ictu oculi que en un abrir y cerrar de ojos, nos ofrece, en toda la crudeza de un comportamiento animal, una imagen de lo efímera que son la vida y las estructuras sociales, a pesar de todos nuestros esfuerzos por disimularlo.

carlos g. de castro

SITIOS WEB SOBRE GRETA ALFARO:

miércoles, 9 de diciembre de 2009

OVER THE GAME

PUBLICADO EN EL NÚMERO 25 DE ARTECONTEXTO
SEVILLA, ESPACIO INICIARTE
COMISARIO 
ZEMOS98 Gestión Creativo Cultural Flavio Escribano

Participantes: Totto Rena, Bungie Studios y Neil Blomkamp, Joan Leandre, Mar Canet, Jayme Cochrane, Travis Kirton, Valeriano López, Felipe G. Gil, Daniel Franca y Enrique Colinet, Clara Boj y Diego Díaz, Julian Oliver, Michael Schuon, Steph Thirion, Chiu Longina, Pedro Delgado, CaninoStudios, Abelardo Gil-Fournier, Ominous Dev y Jun Fujiki.

La iglesia gótico–mudéjar de Santa Lucía, sede del Espacio Iniciarte de Sevilla, alberga del 26 de noviembre de 2009 al 17 de enero de 2010 la muestra Over the game, sobre arte y videojuegos. Comisariada por Flavio Escribano de Arsgame y el equipo Zemos98.

La exposición organizada a través de diferentes lugares que siguen la lógica espacial del edificio religioso, parece configurar una analogía entre el antiguo culto católico y el actual culto a la tecnología, encarnado en forma de videojuegos. Así, en la cabecera de la iglesia, encontramos la pieza In the name of Kernel! Song of the Iron Bird, 2006–2007, de Joan Leandre, una videoproyección basada en la estética de los simuladores de vuelo, celestes imágenes para el altar del templo de Santa Lucía.

Frente a la pieza de Leandre, en el centro de la nave mayor, se sitúa una estructura flexible de tubos de cartón, obra de los arquitectos Paco González y Nacho Domínguez – Adame, que cierra esta zona como si de un antiguo coro se tratase. En este lugar hallamos los mejores ejemplos del más acierto notable de la exposición: el de unir lo local con lo global. Aquí piezas de realizadores andaluces, como Estrecho Adventure ,1996, de Valeriano López, vídeo que a través de la estética de los videojuegos denuncia el drama de la inmigración, o s-2211, 2007 – 2008, paseo virtual por un inundado sótano de la facultad de Bellas Artes de Sevilla, de Daniel Franca y Enrique Colinet; conviven con obras de gran reconocimiento internacional, caso de levelHead, 2007, el juego tridimensional del neozelandés Julián Oliver, un kafkiano laberinto a base de cubos interactivos.

El último lugar de la exposición es una sala de juegos situada en la capilla del crucero de la iglesia que alberga cuatro máquinas para jugar y dos piezas producidas exclusivamente para la exposición: Sala de máquinas, 2009, concierto de ambientes sonoros para seis altavoces dirigido por Chiu Longina y producido por Berio Molina; y PrayStation 4 an extra life, 2009, instalación de luces y dibujos de Pedro Delgado, que siguiendo una arquitectura clásica de frontón partido, hace las veces de retablo de altar en una postmoderna capilla consagrada al ocio y la recreación colectiva.

La exposición se completa con varias piezas individuales situadas en las naves laterales de la iglesia. De entre ellas podemos destacar Atari Cold War, 2007, la obra más autocrítica de la exposición, creación de uno de sus comisarios, Flavio Escribano. La infografía de gran formato combina dos imágenes de míticos videojuego de Atari: en la parte superior un caza soviético, rodeado de hoces y martillos, vuela amenazante; mientras en la inferior un helicóptero norteamericano, sobre un fondo estrellado, augura un inminente enfrentamiento. En el catálogo de la exposición habla Escribano sobre estos videojuegos orientados a la propaganda, como medios de demonización del enemigo y estetización de los elementos de represión – emancipación.

A pesar de la pieza de Flavio, quizás sea precisamente la autocrítica al entorno de los videojuegos, lo que más se eche en falta en Over the Game. Carencia compartida, no obstante, con la mayoría de muestras que sobre Net.art y videojuegos se vienen realizando. La celebración del entorno de la Web 2.0 y la supuesta libertad que conllevan estas tecnologías, no es excusa para olvidar una cierta distancia crítica, siempre útil, entre los profesionales del medio y el propio medio. Pues como decía Paul Virilio a Philippe Petit en 1997, durante la entrevista recogida en el libro El Cibermundo, la política de lo peor: sin libertad para criticar la técnica no existe progreso técnico, sino una tiranía de la tecnociencia.

carlos g. de castro



viernes, 9 de octubre de 2009

AFTER THE FINAL SIMPLIFICATION OF RUINS

PUBLICADO EN EL NÚMERO 24 DE ARTECONTEXTO
VITORIA, CENTRO CULTURAL MONTEHERMOSO
CLAUSURADA EL 3 DE ENERO DE 2010
COMISARIO COSMIN COSTINAS



Artistas participantes: 

FLÁVIO DE CARVALHO, WILSON DÍAZ, SUNG HWAN KIM, MARIA LASSNIG, ERLEA MANEROS ZABALA, ANIA MOLSKA, ANU PENNANEN, LOTTY ROSENFELD, KATEŘINA ŠEDÁ, APICHATPONG WEERASETHAKUL.




En el centro cultural Montehermoso encontramos hasta el tres de enero del próximo año, la muestra del comisario Cosmin Costinas (Rumania, 1982) After the final simplification of ruins. Título inspirado en una cita de Clarice Lispector en la que la escritora brasileña de la generación del 45, realiza una comparación entre Brasilia y Roma. Analogía por medio de la cual reflexiona sobre la creación de ciudades a partir de ruinas anteriores. A través de esta conexión con la literatura, comienza una exposición ecléctica, en la que el comisario ha realizado una amplia selección de propuestas artísticas de creadores de muy diferentes generaciones, geografías e intereses.

La exposición pretende ser una toma de consciencia, en torno al modo en que prácticas artísticas y discursos expositivos, deben encarar la representación de la historia. En el texto que presenta la exposición, Costinas habla sobre la proliferación en la última década de un gran número de propuestas artísticas, que tienen en la historia su referente fundamental. En esta dirección cabe señalar que el fenómeno no es únicamente artístico. En la introducción de su libro Políticas de la memoria y memorias de la política, la historiadora española Paloma Aguilar, cuenta como en los últimos quince años han proliferado, en el mercado editorial, gran cantidad de libros en los que la palabra “memoria” figura en el título.

En torno a este hilo encontramos obras como la de la artista Lotty Rosenfeld (Chile, 1943), una serie de fotografías sobre intervenciones comenzadas en Santiago de Chile en 1979 con Una milla de cruces sobre el pavimento; y que con posterioridad llevó a otras ciudades como la Habana o Washington D. C. La acción consistía en cruzar con cintas blancas las líneas discontinuas de la calzada, creando de este modo una hilera de cruces. En el Chile de Pinochet, suponía una protesta inesperada y una reivindicación del espacio público, frente a una política del olvido que pretendía anular toda voz ajena a la oficial.

La huida de los discursos únicos y las pretensiones totalizadoras encuentra, para Costinas, un importante apoyo en la crítica a la modernidad. Ejemplo de ello, es la documentación ofrecida en torno a una intervención llevada a cabo por Flavio Carvalho (Brasil, 1899), en las calles de Sao Paulo en 1956. En su acción el artista diseña una vestimenta de connotaciones femeninas con la que pasea por la ciudad, cuestionando de este modo los convencionalismos, en torno a modos de comportamiento y roles de género propios de la modernidad. Junto a las fotos que documentan la acción artística encontramos otras que son su antítesis; imágenes de la fundación de Brasilia, la nueva Roma para una moderna y occidentalizada Brasil.

FLÁVIO DE CARVALHO
New look - 2 peças, 1956.
Cortesía Ricardo de Carvalho.

De la mano de un arte que nos habla de la historia en mayúsculas, ha surgido también un tipo de producción artística preocupada por la representación de lo local. En estas aguas se mueve la obra There is nothing there de Katerina Sedá (República Checa, 1979), quién plantea una revalorización de lo cotidiano a través de un juego comunitario, en el que un pueblo entero realiza sus actividades cotidianas al mismo tiempo. Dando visibilidad, de este modo, a una rutina que normalmente queda oculta y se vive de forma inconsciente.

En definitiva After the final simplification of ruins, sin ofrecer respuestas ni marcar líneas a seguir, plantea interesante preguntas en torno a las formas de pensar el pasado. Un pasado que debería servir para ayudarnos, a través de su revisión crítica, a la construcción de sociedades más justas. El riesgo que corremos es entender estas relecturas como el fin de la historia, que solo sirvan para cerrar el círculo, transformándose el futuro en una repetición ad infinitum de nuestro pasado, el vivir entre ruinas del que nos habla el comisario.

carlos g. de castro

miércoles, 7 de octubre de 2009

“Democracia es una reflexión en torno al poder”

MIÉRCOLES 7 DE OCTUBRE DE 2009. NÚMERO 111

Conversamos con Pablo España, miembro del colectivo Democracia (democracia.com.es) junto con Iván López. Una apuesta artística que arrancó en 2006 y que nos muestra la capacidad del arte para intervenir en lo social.

Juan José Ibarretxe y miembros del Gobierno vasco asistieron a la exhibición de Biktimak #3, de Democracia, en el Parlamento de Vitoria XIMO MICHAVILA


¿Cuáles son los objetivos y estrategias de Democracia?
El arte es un espacio donde gente como nosotros puede tener una audiencia, puede encontrar un interlocutor, en otros espacios es realmente mucho más complicado. Cuando comienza el proyecto y escogemos Democracia como nombre, estamos marcando una línea de actuación.
Todos nuestros trabajos van a ser reflexiones en torno a temas del poder y a la propia organización social en la que nos desenvolvemos. Un aspecto fundamental de Democracia es el trabajo colectivo, que se piensa asimismo como elección política a la hora de plantear nuestro papel como productores artísticos. Nos interesa esa forma de trabajo, ya que se basa en la discusión, en el enfrentamiento de ideas y en el diálogo continuo.
¿Buscáis generar espacios de fricción y diálogos entre espectador y artista?
Entendemos que toda obra de arte es siempre colectiva, aunque sea producida por un solo individuo. Es decir, para que una obra posea cierta relevancia social ha de existir una comunidad que la acoja y la haga importante. Todas nuestras piezas se cierran en torno a ese factor, es decir, reflexionan sobre cómo serán recibidas y qué espacios de pensamiento o de interrogación pueden abrir. No debemos confundir esta postura con el arte participativo o con el arte relacional. Esa idea que plantea el arte como un lugar de encuentro, para nosotros en muchas ocasiones es más un punto de refracción, un lugar del que huir. Por otro lado, Democracia intenta rebasar la propia esfera de lo artístico. Aunque trabajamos desde la estética, si el arte tiene algún aspecto interesante aún es el espacio de indeterminación tan grande que genera. En ese sentido nos interesa que nuestros proyectos circulen sin la etiqueta “arte”, así, mientras una audiencia contempla un objeto artístico, otro tipo de público no lo reconoce como tal.
En 2007 presentasteis el Memorial al terrorista suicida: una escultura de 3,30 metros sobre un pedestal que reza “Todos sois culpables salvo yo” ¿Es el terrorista suicida el último héroe romántico?
Yo no sé si es el último héroe romántico, lo que no me gusta pensar es que un terrorista pueda ser un héroe. Desde luego sí responde a una figura romántica: alguien capaz de prepararse para hacer algo, llevarlo hasta sus últimas consecuencias y dar su vida en el intento… Ése es el paradigma del héroe y también del artista romántico. Nosotros estamos en contra de ese tipo de clichés, aunque por otra parte, como afirma Paul Virilio, el terrorista y el artista comparten cosas, al querer hacer ese gran acto que cause una conmoción y un impacto que le haga ser reconocido. En toda la postura de las vanguardias de oposición al sistema burgués había mucho de terrorismo, un terrorismo no efectivo, sino simbólico.
Esa pieza os trae un encargo del Parlamento vasco para el monumento a las víctimas del terrorismo. En esta ocasión planteáis una escultura que representa a un muerto bajo una manta térmica. ¿Quién descansa bajo la manta? Bueno… debajo de la manta no hay nada, está hueco. Este vacío a lo que alude es a la imposibilidad de representar a una víctima. Aceptamos el encargo porque creíamos que, si estamos trabajando en un ámbito de lo social y lo político, no podíamos sustraernos. Éramos conscientes de todas las sensibilidades que había en juego, nuestra respuesta ante eso fue acudir a la literalidad más absoluta y en esa literalidad de la imagen mediática, del muerto cubierto por la manta térmica, se representa la imposibilidad de restitución simbólica desde el arte hacia la víctima. Creemos que esta escultura habla del fracaso, de no poder representar a la víctima.
¿Que proyectos estáis desarrollando en este momento?
Nuestro último trabajo se presenta bajo el título Subtextos. Dirigido a la comunidad marroquí de Cartagena, consistía en la intervención de vallas publicitarias con mensajes políticos escritos en árabe. Eslóganes de tradición occidental, muy gastados para nosotros, como “todo el poder para el pueblo”, resultan para ellos realmente impactantes. También nos interesaba generar la paranoia social. Para el español la reacción fue decir “¿qué pone ahí?”, una reacción casi de amenaza. Cuando lo único que tenían que hacer era preguntar a sus vecinos qué era lo que ponía. Actualmente estamos trabajando con los ultras del Girondins de Burdeos, los Ultramarines. Nos interesa esa colaboración porque vemos que son organizaciones de carácter popular autogestionadas. Los Ultramarines son en la ciudad el único grupo organizado que se identifica con una postura política que no tiene cabida en el marco oficial. Hay que decir que la imagen que existe en España de los ultras futbolísticos es la de hordas fascistas. Pero también hay otro tipo de grupos: anarquistas, antisistema, etc. Justamente nuestro trabajo con los Ultramarines fue buscar un lenguaje común con el que representar una ideología compartida. Vamos a colaborar con ellos y durante un partido de fútbol sacarán pancartas con frases de contenido político que les hemos proporcionado tras consensuarlas con ellos.
carlos g. de castro y mariano lópez

jueves, 16 de abril de 2009

La ciudad como campo de acción. DOS JOTAS

JUEVES 16 DE ABRIL DE 2009. NÚMERO 100


Sombras de policías, carteles con prohibiciones sorprendentes, calles con nombres-denuncia... Las acciones de DosJotas cambian el sentido el entorno urbano.

PROHIBICIONES. Intervención en carteles en los que se modifica el contenido, en Madrid / Dosjotas


El arte urbano como defensa del espacio público, un compromiso con la calle. La acción artística como reivindicación de este espacio, antiguo lugar de reunión y hoy, cada vez más, sólo una gris zona de tránsito. Acciones artísticas para el ciudadano, para luchar contra la destrucción de lo público por el avasallamiento de lo privado.
DosJotas es el seudónimo bajo el que trabaja un artista urbano. Creció haciendo grafitis en las paredes de su barrio y desde entonces no ha abandonado la calle. A partir de 2003 se aleja de las prácticas del grafiti tradicional y forma un dúo con un colega. Un año después, su compañero se ve obligado a dejar las intervenciones en la calle y desde entonces este artista trabaja en solitario.
El paso del grafiti al posgrafiti comienza cuando conoce el trabajo de artistas como Obey, Spy, Eltono o el malagueño Rogelio López Cuenca; es quizá este último quién más le ha influido. Desde este momento adopta una postura crítica que le llevará a cuestionar los mecanismos que articulan la ciudad en que vivimos.
Crear conciencia ciudadana por medio de acciones de guerrilla, bombardeando las calles con pegatinas y carteles. Objetos creados por medio de la técnica del apropiacionismo, una acción artística que consiste en modificar calculadamente imágenes de instituciones, empresas o medios de comunicación. Por medio de esta alteración se reinterpreta el mensaje, generando un nuevo código simbólico que pone de manifiesto la oscura realidad que se esconde tras imágenes aparentemente inofensivas.
Entre las numerosas intervenciones que DosJotas ha realizado en ciudades como Barcelona, Nueva York, Madrid, San Francisco o Valencia, destacan algunos ejemplos como su acción en el metro neoyorquino, las plantillas con sombras de Barcelona y las prohibiciones, también con plantillas, ejecutadas en Madrid. La documentación de estas operaciones, junto con algunas otras, fue incluida en la muestra psicogeografías: espacio y memoria, comisariada por Juan Antonio Álvarez Reyes y que ha recorrido varias localidades madrileñas durante 2008.
En verano de 2007, DosJotas visitó Nueva York y aprovechó su presencia allí para intervenir en el metro. Esta acción consistió en la alteración de los carteles del metropolitano por medio de pegatinas. Una apropiación de su estética que modificaba el contenido. Así, tras la operación algunas calles pasaron a llamarse Ignorance Street, War Street o Hypocrisy Street.
La acción de Barcelona fue diferente. A principios de 2008 el artista se desplazó a la capital catalana, donde intervino directamente en la calle por medio de plantillas. Éstas generaban dos tipos de sombras que salían de los bolardos, siluetas humanas y de policías. Sombras humanas como metáfora del papel real de los ciudadanos dentro de la ciudad, que cada vez les pertenece menos y donde son tan invisibles como el propio mobiliario urbano. En el caso de las sombras de policías, la alusión especula sobre el aumento del control y la opresión policial que se vive en los países desarrollados, una obsesión por la seguridad que las plantillas de DosJotas resumen en la inquietante idea de que “siempre estamos vigilados”. El trabajo realizado en Madrid continúa la reflexión sobre el papel de las personas dentro de la urbe contemporánea.
El tema es el de las prohibiciones que nos incluyen a todos y que las nuevas ordenanzas cívicas multiplican por doquier. Esta intervención se realiza sobre carteles existentes, en los que, por medio de plantillas, se altera el contenido. El trabajo de DosJotas es un ejemplo de que el arte supone algo más que crear objetos de consumo. Sus acciones ponen de manifiesto las perversiones de un sistema aparentemente cívico, que cada vez es más privado y antisocial. En este sentido, su práctica artística es un ejercicio de resistencia que aboga por una ciudad más humana. 


carlos g. de castro

jueves, 19 de marzo de 2009

Lenguajes artísticos y conciencia política. COLECTIVO DAÑOS COLATERALES

JUEVES 19 DE MARZO DE 2009. NÚMERO 98

Daños Colaterales es un colectivo de artistas que ha decidido hacer de sus obras dardos envenenados contra el consenso y el olvido. Bajo la forma de piezas artísticas, sus trabajos introducen candentes cuestiones de actualidad política.

‘¡VISITE NUESTRO BAR!’ pone de manifiesto el apoyo de determinadas marcas al régimen franquista / Daños Colaterales


Daños Colaterales es un colectivo madrileño fundado en 2007 por María González y Mariano López, artistas formados en la Facultad de Bellas Artes de Aranjuez. Con ellos han colaborado activamente los profesores universitarios Laura de la Colina y Daniel Villegas. El colectivo basa su actuación en el desarrollo de proyectos artísticos donde arte y política formen parte del mismo mecanismo de reflexión. Su trabajo consiste en la creación de piezas que introduzcan mensajes disonantes en la sociedad a través de los sistemas de difusión del arte, favoreciendo la aparición de una conciencia crítica.
A lo largo del año y medio que llevan funcionando como colectivo han realizado una decena de piezas, de las cuales destacan, entre otras, Tierra prometida, Madrid, ¡hagámosle inexpugnable! y ¡Visite nuestro bar! Tierra prometida, presentada en diciembre de 2007 en el Espacio F del mercado de Fuencarral, consistía en la instalación de un juego de mesa. La partida comenzaba cuando tres jugadores, uno por cada nacionalidad implicada en el conflicto de Oriente Medio (palestino, israelí o estadounidense), ocupaban su lugar.
La pieza pone de manifiesto el carácter tácito del conflicto palestino, ofreciendo al visitante la posibilidad de participar en un juego sin objetivo, donde habrá de matar continuamente al otro por un territorio que jamás controlará totalmente. En definitiva, de una manera sutil resalta la maquiavélica dinámica de los hechos; mientras haya personas dispuestas a adoptar una identidad nacional, el conflicto continuará. Al mismo tiempo, el juego recrea el cinismo de Occidente, para quien el conflicto, retransmitido todos los días por televisión, queda reducido a la simple categoría de espectáculo.
Madrid, ¡hagámosle inexpugnable!, creada en febrero de 2008, fue una pieza diseñada para participar en la muestra itinerante ‘Psico geografías, espacio y memoria’, una exposición que durante todo 2008 recorrió muchos de los pueblos de la periferia de Madrid y que estaba comisariada por Juan Antonio Álvarez Reyes. La pieza se presentó como una instalación en la que se mostraban objetos de souvenir disponibles para su venta, objetos que eran carteles modificados de la Guerra Civil.
Lo interesante es que cada uno de ellos mostraba dos fechas inscritas en un triángulo a modo de logo comercial; la primera, el momento en que fueron invadidos por las fuerzas golpistas; la segunda es la fecha en que se construyó el primer centro comercial en la localidad. De este modo se plantea una analogía entre la invasión fascista y la expansión consumista. Durante la guerra, los pueblos de la periferia lucharon contra las tropas de Franco por mantener su identidad y libertad ideológica.
Hoy, aunque nadie luche por ellas, la expansión de los centros comerciales en estos mismos pueblos supone una nueva amenaza para esa identidad y libertad de conciencia. ¡Visite nuestro bar! fue una instalación que Daños Colaterales presentó en la exposición ‘Creador de Dueños’, una muestra comisariada por Pablo España e Iván López, del Colectivo Democracia, realizada en Madrid de mayo a junio de 2008.
La pieza consistía en la preparación de un catering muy especial. Con sumo cuidado, el colectivo seleccionó productos de multitud de empresas españolas en activo, que tras la victoria fascista del ‘39 habían agasajado a los triunfadores desde su publicidad. Se realizó entonces un trabajo de sustitución de las etiquetas contemporáneas por las de la época.
Con esta sustitución quedaba explícito el apoyo de determinadas empresas al régimen franquista, resaltando al mismo tiempo las posturas ideológicas que esconden ciertas marcas de consumo habituales. ¡Visite nuestro bar! invita al espectador a reflexionar sobre estos hechos y la conveniencia o no de degustar dichos productos.
Quizás lo más interesante de este colectivo sea el uso de herramientas estéticas para, desde las trincheras del arte, lanzar dardos contra las cortinas de humo levantadas por los medios masivos. Daños Colaterales es un buen ejemplo de que el arte tiene mucho que decir en el mundo de la política y en la sociedad. Los lenguajes artísticos pueden ser un poderoso medio para ganar la lucha por la libertad de conciencia sin renunciar a sus principios estéticos, es decir, siendo arte y no propaganda. 


carlos g. de castro

sábado, 17 de enero de 2009

DO IT YOURSELF; LACAN. De la serie de FELICITACIONES NAVIDEÑAS.



Do it yourself; Lacan
. Es una propuesta que el colectivo Daños Colaterales ofreció estás pasadas navidades.

Una postal lista para imprimir que infiltrada en el contexto consumista – compulsivo de la festejada navidad, nos recuerda la contundente respuesta que Lacan espetó a algunos estudiantes del mayo del 68 (¿otra fiesta?).

Durante esta revolución a la francesa, algunos estudiantes orgullosos y prepotentes lanzaron al filósofo el famoso dardo “Lacan, ¿tus estructuras podían predecir esto?”. La respuesta más que lapidaria del filósofo fue: “Buscáis un nuevo amo y lo vais a tener: la universidad”.

Pero, ¿Qué tiene esto que ver con la navidad? Y ¿Qué ha querido Daños Colaterales decir con esto? Haciendo un ejercicio de fantasía voy a intentar contestar a estas preguntas, podría preguntárselo a ellos pero me parece más divertido hacerlo de este modo, sin que la influencia de sus respuestas me impida decir estupideces.

Podemos hacer un circense ejercicio metafórico y decir que ellos son Lacan y la navidad el mayo del 68. Para esto habría que hablar de que en la navidad más que nunca somos masa consumista, ávida de objetos bonitos, nuevos y relucientes. Podríamos decir, que como Lacan a los universitarios, Daños Colaterales quiere dar una bofetada a las elucubraciones navideñas, apropiándose de uno de sus signos, las postales. De este modo realizarían un ejercicio de infiltración en el sistema, añadiendo interferencias que sin ser una crítica frontal a la situación consumista imperante, dan entrada a mensajes que incitan a reflexionar favoreciendo el pensamiento crítico sobre lo cínico e hipócrita que hay en estas fechas.

Sin embargo ni ellos son Lacan, ni la navidad el Mayo del 68. Esta interpretación no es solo falsa, sino también absurda. Para empezar la pieza recibida en navidad es sencillamente una postal más, no es un objeto diferente que contenga una a priori una crítica a la institución navideña. Y no solo eso, la postal como postal sigue absoluta y escrupulosamente la tradición. De hecho yo estoy dispuesto a utilizarla como felicitación las próximas navidades.

De todas maneras, el título de la serie Felicitaciones Navideñas, nos dice claramente que la fecha tiene su importancia. Cada uno que reflexione sobre las intenciones del colectivo a este respecto, habría que ver que daños colaterales produce la navidad, como por ejemplo la gran cantidad de basura que queda en las calles tras las comidas y las entregas de regalos, problemas que el colectivo ha evitado enviando por mail la felicitación.

Personalmente y como fetichista que soy la hubiera preferido en cartón, pero que le vamos a hacer.

Lacan qué tipo tan interesante ¿no? Yo la verdad, no lo se. Les voy a confesar un pecado que seguramente merme enormemente mi capacidad crítica sobre esta obra. En la actualidad (me estoy ruborizando) os confieso que no he leído absolutamente nada de este filósofo. De todas maneras en vocación kamikaze entraré a interpretar sus palabras y el sentido o efecto colateral que éstas pudieran tener en la obra.

Lo primero que sugiere es que muchas veces lo que pueden parecer acciones liberadoras o mejor dicho acciones propias de la singularidad y encaminadas a fomentarla, en realidad responden a la necesidad de ser controlados, de tener límites.

¿No pueden considerarse muchas actitudes rebeldes de los adolescentes como una pedida a gritos de autoridad por parte de sus padres?

Pongamos un ejemplo, imaginemos que en un instituto un grupo de alumnos realiza una “sublevación” en clase ante un profesor, una sublevación en la que exigen sus derechos porque piensan que el profesor ha fallado a sus exigencias. Pensemos que son buenos y modélicos estudiantes, tienendo el gesto de madurez de poner sus reivindicaciones incluso por escrito. ¿Qué buscan estos estudiantes? ¿libertad? ¿autonomía? Pues no, en realidad lo único que buscan es un amo mejor, un amo que no les falle y que no les haga sentirse inseguros.

Las palabras de Lacan hacen referencia por tanto, a que esos estudiantes lo que hacían es dar una pataleta contra alguien a quien quizás considerasen que les había fallado. Por otra parte, los estudiantes, al preguntar al filósofo si sus estructuras podían predecir lo sucedido en un sentido amplio quizás no solo le criticaban, quizás tan bien le pedían ayuda porque sinceramente no sabían que hacer con el éxito cosechado. Lacan en su respuesta ponía de manifiesto que a los estudiantes no solo les hubiera encantado que las estructuras de Lacan o cualquier otro pudieran darles explicaciones, sino que los universitarios no eran lo suficientemente autónomos para crear “estructuras propias” y su acción era mera y sencillamente en negativo.

En el contexto de Daños Colaterales esta postal puede ser una advertencia quienes creyendo ser críticos y autónomos no tienen la suficiente valentía como para lanzarse hacia una verdadera autonomía y una verdadera libertad intelectual.

Yo por mi parte me incluyo entre los advertidos, una buena advertencia es siempre digna de tener en cuenta.
carlos g. de castro